Este post es un resumen muy personal de lo que viví en las I Jornada de Juego, Gamificación y Aprendizaje.del 25 marzo de 2017 en Madrid.
(Aviso a navegantes: si habéis leído el post de Isidro Rodrigo quizás esto os suene, ya que tuve el enorme placer de compartir con él la jornada y uniforme de cuadros, los clásicos de los GSM ya sabéis de lo que os hablo)
La jornada de ayer fue una de esas que te dejan con una sonrisa en la cara y con la sensación de «así sí» por dentro.
Sonrisas por los momentos compartidos, por los reencuentros, por las desvirtualizaciones, por las caras nuevas, por los aprendizajes y sobre todo por lo que se respiraba en el ambiente: ilusión, pasión, ganas de transformar, de compartir, de jugar…
La jornada empezó con unas largas colas que demostraban que esto ya ha dejado de ser una idea de unos cuantos «flipados» y que hay un interés real por cambiar la educación y por el papel que el juego tiene. Al inicio estrés sintomático de lo que ayer les comentaba a los organizadores, si de algo pecó la jornada de ayer fue de exceso: de gente, de contenidos, de propuestas… Nos dieron el programa , materiales de un juego al que no jugué (exceso de tiempo e inputs), un photocall (ídem) y el gran dilema: ¿donde nos apuntamos?
Nos recibió el gran maestro de ceremonias Javier Espinosa movilizando al auditorio.
Solos iremos más rápido pero juntos llegaremos más lejos #JGA17 #Juegos #Gamificación #aprendizaje pic.twitter.com/ZMebz0X22O
— Ana Ordás (@aordas) March 25, 2017
La conferencia inaugural la dió Oriol Comas (un sabio de esto de los juegos director de la feria Dau Barcelona) con dos grandes reflexiones: muchos han jugado y han puesto en valor los poderes del juego y un aviso a navegantes al mundo de la gamificación: citando a Kapp dijo que «Hay dos gamificaciones y una no nos interesa», nada que añadir más que buscar el gif mental de aplausos.
Empieza el maratón de talleres, empezamos por José Luis Redondo del que destaco dos cosas: su pasión que ha contagiado a sus alumnos que diseñan cosas que me dejaron alucinada y la reflexión de que muchos usos del juego en clase son exámenes camuflados, lo que el llamó camuflar el brócoli con chocolate.
Seguimos, toca ver al gran Natxo Maté (sí, soy fan y no puedo ser objetiva con alguien que hace gamificaciones con «Game of Thrones» y «El Ministerio del tiempo») que nos transmitió que él no explica historia, sino que hace que sus alumnos vivan la historia y que para ello el rol es un gran aliado, os adjunto el gran resumen visual que hizo Negrevernis.
Y rápido a ver a Pepe Pedraz, Yon Salgado y JL Zazo, es decir Funnynnovation que nos presentaron «La Isla del Tiempo» un proyecto precioso que une juego (Pepe defiende mucho que No es gamificación), narrativa y una estética preciosa y que permite trabajar competencias. O adjunto el resumen visual de Juan Villar . Personalmente debo decir que me hizo mucha ilusión ver a la criatura de la que me habló Pepe hace meses (post GWC16) en Atocha. Felicidades.
Y llego el momento de una de las desvirtualizaciones que más ilusión me hizo ayer: Oscar Recio, más conocido como Mr Wolf. Es uno de esas personas que transmite pasión por lo que hace, que defiende, con argumentos curriculares y zascas frente a espíritus de madres escépticas que se meten en el cuerpo de niñas indefensas, un trabajo inmenso que solo merece una ola. Porque Oscar crea proyectos preciosos a nivel estético que permiten que en sus clases el inglés se viva, los retos sean diarios y los libros prohibidos una realidad. Si en Twitter engancha en persona atrapa (no me oculto, ayer me declare fan de poster suyo).
Y la charla improvisada tras este taller me hizo perderme las últimas charlas. Porque ayer te quedabas con esa sensación: la de no llegar a todas las charlas, no poder hablar con todo el mundo, no comprar más juegos….
En resumen: necesitamos más eventos de estos, en los que jugar, compartir, co-crear, conspirar y crear otro mundo en la educación y en otros ámbitos (esa es una de mis grandes reflexiones). Personalmente a mi me recordaron a los antiguos (y añorados) GSM capitaneados por Isidro, Victor y Cris en los que un grupo de apasionados compartíamos experiencias, juegos y risas en un entorno distendido, sin «guruses» ni corbatas ni tacticismos.
Cómo dice Pepe «El mundo del juego tiene ya montones de pequeños héroes. Una comunidad ENORME».
La post-jornada fue maravillosa con comida en muy buena compañía (un placer y visita (al fin) a conocer a Cuarto de Juegos, donde por supuesto, pequé porque me enamoré de esta preciosidad:
Para finalizar GRACIAS a todo el equipazo de Gamficatuaula, a los ya mencionados y a Clara, Azahara, Aitor, María y muchos más que me olvido. Gracias por la jornada de ayer, por hacer que otra educación sea posible y por crear espacios necesarios.
Genial reflexión del evento Noemi! Estoy totalmente de acuerdo en que la jornada tuvo demasiado contenido, demasiada gente, en fin… Demasiado que ver. Por una parte creo que es algo bueno, porque te deja con ganas de asistir de nuevo, de conocer a más gente y más experiencias. Pero también genera algo de frustración, sobre todo cuando te coinciden dos experiencias juntas que no te quieres perder. Pero imagínate los que hemos estado en la organización, de un lado para otro, me quedé con ganas de tanto… Sólo he podido asistir a la experiencia de Isaac, las demás han sido un poco de paso… Eso sí, me quedo con las conversaciones con todos vosotros. He desvirtualizado a un montón de gente, conocido a muchas almas gemelas y sólo me quedo con ganas de más y más #JGA17 para el año que viene más y seguro que mucho mejor! Esta semana ya nos ponemos a maquinar. Un abrazoo! Nos vemos pronto 🙂
Los de la organización sois tod@s unos cracks! Creo que el exceso de pasión es bueno y que se trata de canalizarla NUNCA de perderla. La comunidad un 10.
Creo que esto ha sido el pistoletazo y que de aquí pueden (y deben) salir varias experiencias/formatos: quedadas a nivel local/foros on line, proyectos compartidos,… Eso sí, como mínimo una vez al año vernos todos y cargar pilas. Besazo Aitor!